sábado, 25 de febrero de 2012

Otra reflexión,
como podeís ver, a veces me paro a pensar en las cosas que suceden, o me paro a descansar, y reflexionar sobre si todo está o no en su sitio, en el lugar que corresponde, y sinceramente, muchas veces pienso que todo está donde debe de estar, y que soy yo la que se ha colocado donde no corresponde.
ayer abrí un blog con los alumnos y 10 minutos después lo tuve que cerrar, solo son 12, pero ni siquiera haciendo un blog con ellos consigo que participen, y me pregunto ¿cuál es mi expectativa? y respondo que es realizar con la clase un experimento, que trabajen de forma conjunta y se interesen por algo común que ellos realizan, en definitiva, que muestren su capacidad de trabajar en grupo, en algo que les motive. Mostraron verdadero interés en realizar el experimento de los mensajes del agua, pero a la hora de hacer el blog, la mitad de los alumnos, curiosamento todos los chicos, se dispersaron, desatendieron, y dejaron de participar. Mientras que las chicas, seguían dando ideas, y proponiendo texto para que el blog saliera para adelante, pero al ver que la mitad de la clase se había desenganchado, corté por lo sano. Abandoné, di el carpetazo, como se dice por ahí, y dejé el blog sin hacer, no guardé lo que habíamos hecho hasta entonces, les puse un parte a cada uno y me fuí de allí con un mosqueo que me duró hasta que me desperté de la siesta.
¿cómo puedo dejar que eso me pase? es por eso que a veces pienso que no estoy en el lugar adecuado, que debería de estar en un lugar donde mi trabajo se apreciase, pero por otro lado otra voz me dice que actuo sin tener en cuenta lo que tengo delante y que no me adapto a lo que hay. Pero yo ya estoy agotada. Y no tengo ganas ni de seguir andando, quizá también deba darme un tiempo para descansar, y así poder seguir con más claridad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Con tu permiso:

No es acorde a la naturaleza de (la acción) "Ser" cuestionar si Es o No-es. El brillo de la acción ilumina el interior por -la decisión de- la elección de las intenciones (y viceversa). El anhelo de la felicidad es una elusión de nuestra -particular- obligación de ser felices. Sin más.

Buena coraza, que no oprima, y que permita la fluidez y la precisión del movimiento.

Anónimo dijo...

Pitu? Is that you? Is it possible that we know each other? Have you ever been to Hungary?
I know it might be a mistake but I tried to find Maria Luisa from Murcia... My name is Anna. If it's you, please email me @ anna.m.kowal@googlemail.com