miércoles, 23 de febrero de 2011


Un guerrero de la luz sabe lo que vale la pena.
Él decide sus acciones usando la inspiración y la fe. No obstante, a veces encuentra personas que lo llaman para actuar en luchas que no son suyas, en campos de batalla que él no conoce- o que no le interesan-. Esas personas quieren implicar el guerrero de la luz en desafíos que son importantes para ellas, pero no para él.
Muchas veces son personas próximas, que aprencian al guerrero, confían en su fuerza y, como están ansiosas, quieren su ayuda de cualquier manera.
En esos momentos, él sonríe y demuestra su amor, peor no acepta la provocación.
Un verdadero guerrero de la luz siempre elige su campo de batalla.
Paulo Coelho
Manual del guerrero de la luz

2 comentarios:

Isabel Martínez Llorente dijo...

Preciosa imagen, llena de luz y de agua.

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho el texto de Coelho, pero he de decir que no siempre elige su campo de batalla, a veces se ve envuelto en trampas, a veces cae donde no tiene que caer, pero cuanto le ocurre esto, se levanta y recupera su dirección... Y no por caer dejar de ser un guerrero de la luz, pues tiene una condición humana. Gracias.